10 Aspectos de la reunificación de deudas

La reunificación de deudas consiste en agrupar en un único préstamo, las cuantías que se deben de todas las deudas que acumula una persona o unidad familiar.

10 Aspectos de la reunificación de deudas

La Reunificación de deudas. La crisis económica ha llegado a nuestras vidas como si de una epidemia se tratase, sus síntomas: subida de la hipoteca, subida de la gasolina, subida de la cesta de la compra… y sus consecuencias: situaciones de desempleo, recortes salariales, congelación de subidas salariales…, en definitiva, se traducen en una importante pérdida de poder adquisitivo.

A todos nos afecta este mal, en mayor o menor medida, pero especialmente a aquellas personas o familias que antes de la crisis se encontraban ya sobre-endeudadas. Muchas de ellas no han tenido más remedio que optar por el concurso de acreedores, y otras muchas han debido recurrir a medidas diferentes, como es el caso de la reunificación de deudas.

reunificación de deudas

La reunificación de deudas consiste en agrupar en un único préstamo, las cuantías que se deben de todas las deudas que acumula una persona o unidad familiar ( hipoteca, préstamo del coche, créditos al consumo, préstamos personales, deudas en tarjetas de crédito, créditos rápidos, etc ).

La idea básica es recoger en una única cuota mensual de menor cuantía e interés la totalidad de la deuda, de modo que la persona o familia cuenten con más dinero cada mes para hacer frente a la pérdida de poder adquisitivo que ha experimentado con la crisis.

Información adicional sobre la Reunificación de Deudas

Requisitos de la reunificación de deudas

Los bancos o entidades especializadas en este tipo de operaciones de reunificación de deudas exigen la constitución de un nuevo préstamo hipotecario que englobe la totalidad de las deudas que debe reunir una serie de requisitos:

  • El nuevo préstamo hipotecario no debe superar el 70% – 80% del valor de tasación de la vivienda, con el agravante de que la crisis ha motivado un descenso en el valor de los inmuebles y por consiguiente, un descenso en el valor de las tasaciones.
  • El plazo de amortización de este nuevo préstamo no debe superar los 30 – 35 años y la edad de los contratantes a fecha de vencimiento del préstamo no debe ser superior a los 65 – 70 años.
  • La cuota de amortización resultante del nuevo préstamo no debe suponer más del 35% – 40% de los ingresos netos mensuales de la persona o unidad familiar.
  • En ocasiones, también se exige no tener un historial de impagos relevante, que si se dispone de una antigua hipoteca ésta haya sido en gran parte amortizada, no figurar en registros de morosidad, ni estar incursos en procedimientos de embargo.

De cualquier manera, es una operación que necesita un estudio previo de viabilidad por parte de las entidades que lo conceden.

Ventajas e inconvenientes de la reunificación de deudas

La ventaja es única y obvia, permite reducir a una cuota mensual sustancialmente más baja y de menor interés, permitiéndonos un desahogo financiero y recuperar un equilibrio económico de nuestra economía.
Pero lo más relevante aquí es analizar los inconvenientes:

  • La forma de obtener una cuota mensual más baja pasa por ampliar el plazo de amortización de las deudas en el nuevo préstamo, lo que supone un diferimiento en el pago de las deudas y en consecuencia un aumento en el pago de intereses.
  • El reunir préstamos supone cancelar todos los préstamos antiguos, que se traduce en comisiones de cancelación y gastos de cancelación (notaría, registro, gestoría, impuestos). Por otra parte, el constituir un nuevo préstamo también supone afrontar comisiones de estudio, y gastos de apertura (notaría, registro, gestoría, tasación, impuestos). En conclusión, se trata de una operación con un coste elevado que se acumulará a la deuda existente.

Algunas entidades de reunificación de deudas

Repagalia: reparadora de deuda especializada en créditos rápidos.
Repagalia presta servicios de gestión, negociación y repago de deudas con la finalidad de resolver los problemas económicos de sus clientes derivados de la acumulación de deudas.

El funcionamiento de estos servicios se puede resumir en 4 pasos:

  1. Análisis del estado actual de las deudas en base a los datos aportados por el cliente.
  2. Elaboración de un plan personalizado de liquidación en el que se detallarán los importes y plazos a cancelar las deudas.
  3. Negociación de las deudas con los diferentes acreedores.
  4. Liquidación de las deudas.

Para acceder al servicio deben cumplirse los siguientes requisitos previos:

  • Que las deudas que se tengan sean susceptibles de negociación.
  • Encontrarse en atraso en los pagos, es decir en procesos de mora o impagos.
  • Comprometerse a hacer frente a los pagos acordados.

El precio de los servicios se detallan en el contrato e incluye tres conceptos:

  • Una comisión de éxito sobre los ahorros conseguidos.
  • Una comisión de asignación inicial de un asesor de reparación de deuda o reestructuración.
  • Una comisión mensual de gestión.

En todo caso, los costes de Repagalia estarán incluidos en el plan de liquidación, por lo que el cliente podrá visualizar el ahorro neto propuesto respecto a la deuda total.

El servicio está enfocado a créditos rápidos y créditos al consumo pues existe un número limitado de instituciones de crédito con las que Repagalia puede negociar. No es por tanto, un servicio de reunificación de deudas a ultranza, pues no incluye deudas derivadas por préstamos personales o préstamos hipotecarios. En caso, de disponer de dichas deudas se recomienda consultar directamente a la compañía Repagalia.

10 aspectos de la Reunificación de Deudas

  1. Reunificar deudas implica la agrupación de todas nuestras deudas en una sola para reducir lo que debemos pagar mensualmente y poder hacer frente a la devolución de lo que adeudamos.
  2. Se han de agrupar todas las deudas, no podemos escoger unificar unas y otras no.
  3. La operación de reunificación de deudas conlleva cuantiosos gastos, pues se han de cancelar anticipadamente cada uno de los préstamos o deudas que tengamos y constituir un nuevo préstamo, esto implica el pago de distintas comisiones que se acumularán a la deuda existente.
  4. Si el montante de la deuda es importante, la reunificación de deudas llevará aparejada la constitución de un préstamo hipotecario o una ampliación de hipoteca, si por el contrario la deuda final no es muy grande bastará con la formalización de un préstamo personal.
  5. En el caso de tener que constituir un nuevo préstamo hipotecario, este no debe superar el 70% – 80% del valor de tasación de la vivienda, no debe superar los 30 – 35 años y la edad de los contratantes a fecha de vencimiento del préstamo no debe ser superior a los 65 – 70 años, y la cuota de amortización no debe suponer más del 35% – 40% de los ingresos netos mensuales de la persona o unidad familiar.
  6. Existen préstamos personales a medida especializados en la unificación de deudas con tipo de interés y plazos muy competitivos.
  7. Será requisito previo a la reunificación de deudas un estudio previo de viabilidad realizado por la entidad mediadora.
  8. Este tipo de soluciones de agrupación de deudas permiten reducir la cuota mensual a pagar, a costa de aumentar el plazo de amortización de las deudas y por consiguiente con un aumento en el pago de intereses.
  9. La agrupación de rentas puede realizarse a través de una agencia mediadora o preferiblemente a través de la entidad bancaria con la que se tengan la mayoría de los préstamos.
  10. Es posible realizar reunificaciones de deuda a pesar de tener impagos e incluso figurar en ficheros de morosidad como ASNEF.

"Nuestro consejo es que la reunificación de deudas es una operación que se ha de analizar previamente en profundidad y no contratar a la ligera, y dado los requisitos e inconvenientes citados no es apta para todo tipo de personas o familias. Si no se encaja en la operación siempre se pueden buscar otro tipo de alternativas o incluso solo proceder a unificar parcialmente las deudas que paguen mayor interés o mayor cuota."